Institución de DD.HH respaldó a la Guardia Republicana en accionar en el CODICEN

La (INDDHH) elaboró un informe sobre los incidentes registrados en la noche del martes durante el desalojo del CODICEN.

Tanto el CODICEN como el Ministerio del Interior habían solicitado la presencia de un veedor de la INDDHH para que corroborara el accionar de la Policía. En el lugar se hizo presente el presidente de la institución, Juan Faroppa.

“Existía un clima, generado por manifestantes que no eran estudiantes ocupantes, que presagiaba una definición violenta de la situación”, se indica en el informe de la institución.

Asimismo se expresa que desde el punto de vista de la INDDHH, y sin perjuicios de nuevos elementos de juicio que permitan fundar una opinión en contrario, “en el enfrentamiento con los manifestantes sobre Avenida del Libertador y alrededores, objetivamente no existió, por parte de las fuerzas policiales, un uso sistemático, masivo e intencional de la fuerza abusivo y/o excesivo y, por tanto, contrario a las normas y estándares nacionales e internacionales en la materia”.

“No se utilizaron elementos de mayor fuerza agresiva como granadas de gas o balas de goma. La respuesta policial, por parte de la Guardia Republicana fue, en general, proporcional al nivel de agresión generado por algunos manifestantes”, se indica en el informe.

De todos modos, se aclara que ello no significa que “no se hayan observado casos puntuales por parte de algunos efectivos policiales que mostraron, en forma innecesaria, un uso abusivo de la fuerza”.

“Uno de estos casos ocurrió en perjuicio del abogado de los ocupantes, el doctor Pablo Ghirardo, hecho que fue directamente observado por la INDDHH”, aclara.

También indica que de acuerdo a “fuentes absolutamente confiables vinculadas a la actividad docente y que estaban presentes en el lugar -es decir, dentro del edificio del CODICEN-, no se utilizó la fuerza contra los jóvenes ocupantes”.

También se aclara que la intervención de la Republicana fuera del recinto “no se dirigió al grupo de estudiantes ocupantes (que ya no se encontraban en el lugar), sino que se centró en el grupo de manifestantes, muchos adultos y con rostros cubiertos, que enfrentaron con extrema violencia al personal policial”.